El gerundio no perifrástico en el habla del español de La Habana
1 Sección introductoria
El empleo de corpus orales en la descripción gramatical ha permitido identificar fenómenos de la lengua que en otros estudios basados en textos escritos no han podido ser analizados o conocidos. En este artículo mostramos que, en efecto, tal es el caso de un uso particular del gerundio no perifrástico.
El punto de partida de este trabajo es examinar el comportamiento de construcciones con gerundio no perifrástico en el habla oral de La Habana. Para ello, utilizamos un corpus de 46 grabaciones recogidas en esta ciudad a través del Proyecto para el estudio sociolingüístico del español de España y de América (PRESEEA, 2014-).
La exploración del corpus nos permitió identificar diversas estructuras de esta forma no personal del verbo. Además de las construcciones de gerundio no perifrástico que caracterizan al español en general y que han sido analizadas en las gramáticas, el empleo de un corpus oral hizo posible documentar el uso de una clase de oración con gerundio cuyo comportamiento difiere de las construcciones habitualmente descritas. Se trata de una estructura integrada por el verbo ser seguido de una oración de gerundio, cuyo funcionamiento en el contexto discursivo nos hace pensar que estamos en presencia de una oración atributiva.
Antes de discutir estas estructuras, en la sección 2 ofrecemos un panorama general de la conducta de los gerundios en el corpus seleccionado, a la vez que mostramos la vitalidad de varias de dichas construcciones. En un segundo momento (secciones 3, 4, 5 y 6), nos concentramos en la descripción y análisis de la función atributiva de este uso novedoso del gerundio. Basándonos en los ejemplos documentados en PRESEEA, y que complementamos con datos de la Muestra del habla culta de La Habana (González Mafud et alii, 2010) y del Corpus de conversaciones Ameresco-La Habana (González Mafud, 2022), discutimos, además, los aspectos sintácticos y semánticos que, a nuestro juicio, permiten proponer que esta forma no personal del verbo tiene un carácter focal. Por último, en las conclusiones, llamamos la atención acerca del hecho de que para poder explicar estas construcciones atributivas es necesario abordar fenómenos diversos, procedentes de distintas áreas de la gramática.
2 Criterios para clasificar el gerundio
La variabilidad sintáctica y semántica documentada para el gerundio no perifrástico es proporcional a la diversidad de clasificaciones que ha recibido la construcción en la tradición gramatical. Entre los criterios que han determinado estas divisiones distinguimos los predominantemente descriptivos, centrados, entre otros aspectos, en el comportamiento sintáctico y semántico de la estructura. Un primer acercamiento cuestiona si el gerundio funciona como adjunto dentro de un predicado o si, por el contrario, aparece de manera independiente. Un segundo punto de vista aborda la relación que se establece entre el sujeto de la forma no personal y el sujeto de la oración matriz (si coinciden, o si el sujeto del gerundio se refiere al complemento directo o indirecto de la oración principal). Un tercer criterio analiza si el gerundio aparece como una forma lexicalizada dentro de una expresión parafraseable por una locución preposicional, una expresión locativa o modal (Fernández Lagunilla, 1999: §53.1; Moreno, 2014; RAE, 2009)1.
Partiendo de la relación entre los constituyentes de la oración, en específico, si el sujeto de la construcción de gerundio coincide o no con alguno de los argumentos de la oración principal, en gramáticas tradicionales (Gili Gaya, 1967; RAE, 1973) se ha hecho la distinción entre gerundios en construcción conjunta, absoluta o independiente. Se habla de construcción conjunta cuando el sujeto del gerundio es el mismo que el de la oración matriz o del complemento directo de esta; dependiendo de su funcionalidad semántica se clasifican en adverbiales o predicativos2. Por su parte, los gerundios en construcción absoluta serían aquellos cuyo sujeto no coincide con ninguno de los constituyentes de la oración principal. Por último, se distinguen las construcciones en las que el gerundio no perifrástico aparece como núcleo predicativo de la cláusula, estructura que recibe el nombre de gerundio independiente o libre3.
En la Nueva gramática de la lengua española (en lo adelante NGLE) (RAE, 2009), sobre la base de la distinción anterior, pero con una visión más amplia de las estructuras, se clasifican como gerundios circunstanciales o adjuntos los que funcionan sintácticamente como modificadores adjuntos de la oración principal y que en general «expresan el modo en que se lleva a cabo lo significado por el verbo principal» (RAE, 2009: §27.1ñ). Por su parte, los gerundios externos o periféricos, similares a las construcciones de gerundio absoluto, pueden o no coincidir con el sujeto de la oración principal, y su rasgo definitorio es que «introducen alguna aclaración a lo que se afirma en la oración principal», información complementaria que «adquiere matices semánticos diversos» (RAE, 2009: §27.1l). Dentro de esta clasificación se incluyen los llamados gerundios ilocutivos o elocutivos, que «hacen referencia al propio acto verbal a la vez que constituyen ordenadores del discurso» (RAE, 2009: §27.1m) y normalmente se entiende que el sujeto de esta construcción es el mismo hablante que hace el acto ilocutivo.
Además, se mencionan los gerundios lexicalizados o semilexicalizados, aquellos que algunos gramáticos consideran que han perdido sus propiedades predicativas para funcionar como locuciones adverbiales, preposicionales o adjetivales. En esta última clasificación se incluyen algunos gerundios que modifican un elemento nominal, ya sea el sujeto de la oración principal, ya sea el complemento directo.
La NGLE (RAE, 2009: §27.7a) se refiere también al llamado gerundio especificativo o adjetival, cuyo uso ha recibido las críticas de algunos gramáticos (Bello, 1847; Salvá, 1835: 170), dado que se restringe la función de esta forma no finita del verbo solo a la adverbial.
En la investigación que se presenta seguimos la clasificación de la NGLE, pues ante la variabilidad de criterios de clasificación e inconsistencias en muchos de ellos, optamos por distinguir el gerundio que aparece como adjunto al verbo matriz (1), del que se encuentra en construcción absoluta, es decir, desligado de la oración principal como aclaración, información complementaria (2) o como ordenador del discurso (3).
Bueno yo demuestro la amistad siendo sincero, siendo honesto con mis amigos, siendo un amigo ejemplar. (PRESEEA– H11_001)
Considerando que voy cinco días al trabajo y dos descanso, un día trabajo, un día normal trabajo, voy tempranito para, me levanto tempranito, eeh, llevo al círculo al niño, y dejo a, a mi esposa en el trabajo. (PRESEEA– H22_054)
Bueno, hablando de cosas que suceden, a ver un día que que te hayas divertido así, muchísimo, que la hayas pasado súper bien. (PRESEEA– H11_004)
Por otra parte, hacemos la distinción entre gerundios adjuntos y gerundios predicativos. Estos últimos modifican a un elemento oracional que, en nuestro corpus, suele ser el complemento directo de un verbo de posesión (4) o de percepción (5)4.
es preferible a veces que descanse a tener una persona sufriendo en una cama, sin poder valerse ¿me entiendes? (PRESEEA– H22_049)
Vi a tu marido entrando en una academia de baile. (PRESEEA– H33_097)
También identificamos aquellos gerundios no perifrásticos que aparecen como núcleos predicativos de cláusula, es decir, en construcción independiente (6) y los que aparecen como formas lexicalizadas (7).
¿Jugando? (PRESEEA– H32_062)
Si viven al doblar o doblando o para allá, en aquella cuadra no sé. (PRESEEA– M32_072)
En la tabla 1 presentamos la clasificación de los gerundios no perifrásticos encontrados en el corpus con su frecuencia de aparición.
Estructuras de gerundio | Frec. | % |
---|---|---|
Adjunto | 150 | 39% |
Predicativo | 39 | 10% |
Construcción absoluta | 88 | 23% |
Lexicalizado | 34 | 9% |
Independiente | 59 | 15% |
Atributo | 17 | 4% |
Total | 387 | 100% |
Tabla1. Estructuras de gerundio no perifrástico en PRESEEA-La Habana.
Dentro de los datos que apreciamos en la tabla, destaca el predominio de los gerundios en función adjunta, lo cual se corresponde con el valor adverbial primario que tradicionalmente ha recibido esta forma no finita del verbo y, dentro de esta, la función de modo en que se realiza la acción denotada por el verbo matriz es la prominente. El gerundio en construcción absoluta muestra también una alta productividad, vinculada en aproximadamente la mitad de las ocurrencias (41/88) con la función ilocutiva que ejemplificamos en (3). También se puede observar la alta frecuencia de los gerundios predicativos, productividad que posiblemente se deba a la expresividad que ofrece esta estructura al hacer más clara la idea que se quiere comunicar, pues la forma en gerundio generalmente aparece a continuación del elemento nominal que modifica, como se aprecia en los ejemplos (4) y (5). Por otra parte, llama la atención que no se documentan casos claros del criticado gerundio de posterioridad, pues solo en una ocasión (8) se pudiera interpretar este valor temporal.
- Siempre estaba junto con él [mi papá] en los hospitales incluso entré a operaciones con mi papá ayudándolo a operaciones menores que él. (PRESEEA– H12_037)
Sin embargo, no es posible reconocer este significado en (8), pues no existe una marca léxica explícita que implique tal interpretación, ni las acciones expresadas por los verbos matriz y gerundio se relacionan semánticamente como eventos complementarios, que se suceden uno a continuación del otro. Queda más clara la interpretación de finalidad: ‘el sujeto entró a operaciones para ayudar a su papá’. La no documentación en nuestro corpus de gerundios con valor de posterioridad no significa, obviamente, que no sea una construcción utilizada en la variedad cubana del español. De hecho, Almeida (2019) atestiguó su empleo en un estudio sobre lengua escrita en el que analizó un corpus de artículos periodísticos y cartas a la redacción del periódico Granma.
Todas las estructuras mencionadas hasta el momento aparecen descritas en las diversas gramáticas del español, desde las más tradicionales hasta las contemporáneas. Sin embargo, hay una clase de construcción que documentamos en los textos recopilados por PRESEEA-La Habana, que sobresale por su novedad. Se trata de una estructura a la que hemos llamado gerundio atributivo y que ejemplificamos a continuación:
Para mí las navidades, ya a partir del día veinticuatro, ya todo eso es navidad, ya eso es más o menos festejando. (PRESEEA– H21_013)
Yo mis perspectivas son seguir estudiando hasta coger el doce grado y si puedo seguir sigo, pero en mi cen en mi centro laboral, en mi casa hasta que hasta que sea viejo es trabajando y trabajando. (PRESEEA– H11_005)
A pesar de que estructuras similares han sido documentadas por Moreno (2014) en el habla de Mérida, Venezuela, casos como los de (9) y (10) no aparecen explicados en los estudios sobre el comportamiento de los gerundios en el español, ni han sido identificados en investigaciones sobre la lengua escrita de Cuba como la de Almeida (2019), por lo que parecería que es un fenómeno propio de la oralidad.
Este tipo de construcciones es, precisamente, el objeto de discusión de las siguientes secciones de nuestro trabajo. El análisis lo realizamos primeramente en el corpus básico, PRESEEA-La Habana, en el cual registramos 17 casos. Por el interés que despertó esta estructura, que además era recurrente entre varios de los participantes, decidimos comprobar si el fenómeno también se documentaba en otros corpus orales. Así pues, revisamos las Muestras del habla culta de La Habana (González Mafud et alii, 2010), que consta de 45 entrevistas, además del Corpus de conversaciones Ameresco-La Habana (González Mafud, 2022), en el que examinamos las transcripciones de 34 grabaciones realizadas en esta ciudad. A pesar de las características específicas de estas obras, en ellas también documentamos el uso de la construcción (5 ocurrencias en cada una). En total identificamos 27 casos de esta estructura innovadora, que hemos llamado gerundio atributivo.
Son varias las preguntas que nos planteamos desde un punto de vista gramatical. En primer lugar, cuál es la función sintáctica de este gerundio. En segundo lugar, cuáles son los referentes de los sujetos de los verbos implicados en la construcción. En tercer lugar, si hay un denominador común en cuanto a la clase aspectual de los gerundios documentados. Y, por último, qué papel desempeña el gerundio dentro de la estructura informativa de la construcción. En este artículo intentaremos acercarnos a las posibles respuestas a cada una de estas interrogantes.
3 Funcionalidad del gerundio: ¿por infinitivo o atributivo?
Lo primero que cabe preguntarse al abordar las estructuras que nos ocupan y que, como se vio más arriba, resultan ser productivas en el español hablado en Cuba, es qué función sintáctica desempeña el gerundio. En primera instancia, observamos que, en algunos casos, se está utilizando un gerundio en una posición en la que canónicamente esperaríamos un infinitivo.
- A: [eso es] poniéndote tra<alargamiento/>[bas] (Ameresco–HAV_041_03_17)
Un fenómeno similar ha sido mencionado en la NGLE, a propósito de casos como:
- La única forma de abrirlo es (sustituyendo~sustituir) este taladro por el otro (RAE 2009: §27.1.i)
Formalmente, las estructuras presentadas por la NGLE parecerían tener el mismo comportamiento que las detectadas en el corpus. No obstante, a nuestro juicio, habría que considerar dos diferencias esenciales. Por una parte, el caso de (12) está restringido, según la propia RAE, a oraciones copulativas creadas con los sustantivos forma, manera, modo, medio y otros similares. En segundo lugar, el gerundio «expresa el modo de realizar la acción» (§27.1.i). En nuestras construcciones, sin embargo, la función del gerundio no tiene carácter modal, como puede observarse en (13).
- El reggaetón está trayendo, eh, una, eh, ¿cómo es que te voy a explicarte?, eh, un declive, un declive a lo que es la cultura, a los valores, es un declive porqxue a veces trae un mensaje pero traen un mensaje, muy, muy sucio, muy vulgar, que lo que está haciendo es dejando de educar a nuestra generación (PRESEEA–M33_104)
Otro tipo de estructuras que podría arrojar luz acerca de las que nos ocupan son las llamadas oraciones seudohendidas (Sedano, 2015). Obsérvese, a continuación, el paralelismo entre (14) y (15):
Lo que necesito es cantar (Sedano, 2015)
Si ellos que son los que tienen el dinero el poder de de destruir porque lo que están haciendo es destruyendo el mundo con guerras biológicas (PRESEEA– H21_014)
Sin embargo, no todas las construcciones que estamos analizando contienen un sujeto en forma de oración enfática de relativo, según vimos en (9), (10) y (11). La propuesta que queremos hacer es que estamos en presencia de una estructura en la cual el gerundio cumple una función atributiva, similar a la que se le reconoce tradicionalmente al infinitivo. Estas construcciones reflejan una forma general (ser + gerundio) en la cual no solamente es posible incluir las llamadas oraciones seudohendidas y aquellas en las que se reconoce la presencia de un gerundio en lugar de un infinitivo, sino también una gama más amplia de combinaciones sintácticas, que tienen en común la presencia del verbo ser, seguido de un gerundio, pero que varían en la manifestación formal del sujeto sintáctico del verbo copulativo.
4 Sujetos: genericidad
4.1 Sujeto de la oración principal
Dentro de esta variación en cuanto al sujeto de la oración atributiva, identificamos tres patrones estructurales.
En el primero de ellos, el sujeto del verbo copulativo es, en reiteradas ocasiones, un pronombre demostrativo neutro (eso, esto, aquello), que resume el tema de la conversación anterior (16-18).
Para mí las navidades, ya a partir del día veinticuatro, ya todo eso es navidad, ya eso es más o menos festejando. (PRESEEA– H21_013)
Jean Cohen diría que se exacerba la impertinencia semántica, esto es un poco entrando en el funcionamiento ya del tropo… para tenerlo más clarificado desde el punto de vista teórico… (Muestra VII)
Los cuidados a lo mejor fueron un poco exagerados, por parte de nosotros, ¿no? Porque si había que hacerle digamos, vaporizaciones, aquello era la noche entera haciéndole vaporizaciones y la madre no dormía en toda la noche. (Muestra XXVII)
El uso de los pronombres demostrativos neutros eso, esto y aquello, a la vez que cumple una función anafórica en el texto, indica una frontera en la estructura del discurso (Stirling, 2001), al ser un mecanismo de reformulación que condensa la información expresada con anterioridad en un evento único o integral denotado por el gerundio que sigue al verbo ser.
En un segundo patrón, como ya habíamos mencionado más arriba, el sujeto de la oración atributiva es una construcción de relativo (seudohendida), según se aprecia en (19).
- El reggaetón está trayendo, eh, una, eh, ¿cómo es que te voy a explicarte?, eh, un declive, un declive a lo que es la cultura, a los valores, es un declive porque a veces trae un mensaje pero traen un mensaje, muy, muy sucio, muy vulgar, que lo que está haciendo es dejando de educar a nuestra generación. (PRESEEA– M33_104)
El hecho de que la oración de relativo esté siendo introducida por el lo neutro es un punto de coincidencia con el patrón anterior, ya que la seudohendida refiere, de igual manera, al tema del que se viene hablando en el discurso (el reguetón).
Una tercera posibilidad es que el sujeto del verbo copulativo esté formado por términos de carácter general, tal como se muestra en (20).
- Pienso casarme de esa manera lo que bueno, ya rompiendo lo que es la la idiosincrasia de de las bodas que es siendo virgen, ya eso está también un poco abolido en este en estos momentos que se está viviendo. (PRESEEA– M11_010)
Lo que tienen en común estas distintas manifestaciones formales del sujeto es un significado inespecífico, en el sentido de que no hacen alusión a un referente concreto, sino abarcan, de forma concluyente, todo lo que se ha venido diciendo en oraciones previas. Una posible explicación tiene que ver con que no exista un interés en especificar el sujeto de la oración atributiva, porque ya es conocido, no es información nueva (las navidades, las bodas, el reguetón), y lo más relevante de la construcción es la acción denotada por el gerundio.
4.2 Sujeto del gerundio
El carácter inespecífico advertido en los sujetos del verbo copulativo tiene cierta correspondencia con un significado generalizador que observamos en los sujetos del gerundio, válido en las tres personas gramaticales. Para el caso de la primera persona, véanse los ejemplos (21) y (22):
Para mí las navidades, ya a partir del día veinticuatro, ya todo eso es navidad, ya eso es más o menos festejando. (PRESEEA– H21_013)
y yo no creo que se hable tan mal en nuestro país, como para decir: «eres una loca, una arrebatá», y lo que estamos haciendo es deformando un poco lo que es el criterio de, de, de, de la nueva generación… (Muestra XVII)
En (21) el sujeto del gerundio refiere a una primera persona del singular, pero se interpreta que el festejo navideño es, en realidad, un evento realizado por una colectividad. De manera similar, la primera persona plural del sujeto en (22) implica cierto grado de generalización, en el sentido de que somos todos los que estamos deformando el idioma.
No sorprende el hecho de que el sujeto en primera persona pueda desempeñar esta función. Como es sabido, la primera persona, tanto singular como plural, puede recibir interpretación genérica, propiciada por el contexto oracional (Fernández y Táboas, 1999: §27.2.2.1). En el caso de (21), aunque la primera persona está emitiendo su opinión (para mí), se sabe que la Navidad es un festejo colectivo. De igual modo, en (22) el referente de la primera persona plural es toda la comunidad, pues son los hablantes, en general, los que están implicados en «la deformación del idioma».
Si bien la primera persona permite cierto nivel de generalización del evento expresado por la forma no finita, donde se advierte con mayor claridad la genericidad del sujeto del gerundio es en aquellos casos en que su referente es la segunda persona del singular.
- como único tienes contacto con el ser humano, donde tú puedes, es es caminando por las calles, ya te digo en una cola, en un, en un, en un museo, en un teatro (PRESEEA– M33_103)
En (23), el referente de la segunda persona del singular no es el interlocutor, sino se observa una intención generalizadora que pretende mostrar la forma universal de contactar con los seres humanos. Al igual que sucedía con el uso de la primera persona plural (véase ejemplo (22)), en esta interpretación totalizadora de la segunda persona del singular el hablante queda incluido (Clancy y Merino, 2023: 307; Fernández y Táboas, 1999: §27.2).
Esta interpretación universal puede observarse también cuando el gerundio alude a una situación general, cuyo sujeto no es un individuo específico, sino refiere a «la gente», «todo el mundo», como se aprecia en (24).
- Pienso casarme de esa manera lo que bueno, ya rompiendo lo que es la la idiosincrasia de de las bodas que es siendo virgen, ya eso está también un poco abolido en este en estos momentos que se está viviendo. (PRESEEA– M11_010)
De hecho, la lectura genérica se ha asociado con los infinitivos, debido a la ausencia, en esta clase de palabra, de flexión verbal (Fernández y Táboas, 1999: §27.2.1), lo que refuerza la idea de una conexión entre nuestras estructuras con gerundio (también carentes de flexión verbal) y las oraciones atributivas de infinitivo.
A pesar de la posibilidad de estos gerundios de referir a sujetos con una carga genérica, no hay ningún impedimento para que las estructuras analizadas se construyan con sujetos referenciales, como sucede con el resto de los gerundios en general, según puede observarse en los siguientes ejemplos:
Yo mis perspectivas son seguir estudiando hasta coger el doce grado y si puedo seguir sigo, pero en mi cen en mi centro laboral, en mi casa hasta que hasta que sea viejo es trabajando y trabajando. (PRESEEA– H11_005)
Por eso te digo, son dos, dos, dos momentos que recuerdo que, que mi vida ha peligrado ¿no? Pero, ninguno de ellos ha sido ni en carretera ni viajando en carretera. (PRESEEA– H21_014)
Los cuidados a lo mejor fueron un poco exagerados, por parte de nosotros, ¿no? Porque si había que hacerle digamos, vaporizaciones, aquello era la noche entera haciéndole vaporizaciones y la madre no dormía en toda la noche. (Muestra XXVII)
Cuando yo voy a ese lugar que voy de paseo porque me queda familia allí, nos sentamos y es horas comentando todas las travesuras que hacíamos, cómo jugábamos, las cosas, son recuerdos tan bonitos que que yo creo que sí esos amigos perduran siempre (PRESEEA–M31_031)
Los sujetos de (26) a (28) aparecen en primera persona, lo cual se justifica por las características del corpus utilizado, y tienen como referente un sustantivo animado. Sin embargo, estas estructuras comparten con las de carácter genérico el hecho de que el sujeto, ya suficientemente conocido (yo, mis perspectivas, mi casa, mi centro, mi vida, por parte de nosotros), disminuye su relevancia ante la fuerza de la acción expresada por el gerundio, sobre todo debido al carácter imperfectivo de este.
5 Aspecto
Como es sabido, aunque el gerundio no presenta marcas de flexión, sí se caracteriza por expresar aspecto imperfectivo (RAE, 2009). Esta propiedad se observa claramente en el gerundio atributivo que estamos describiendo:
Cuando yo voy a ese lugar que voy de paseo porque me queda familia allí, nos sentamos y es horas comentando todas las travesuras que hacíamos, cómo jugábamos, las cosas, son recuerdos tan bonitos que que yo creo que sí esos amigos perduran siempre (PRESEEA–M31_031)
Los cuidados a lo mejor fueron un poco exagerados, por parte de nosotros, ¿no? Porque si había que hacerle digamos, vaporizaciones, aquello era la noche entera haciéndole vaporizaciones y la madre no dormía en toda la noche. (Muestra XXVII)
Mira, yo podría decirte también que realmente donde yo más, donde más trabajo he hecho en todos estos años de Revolución, ha sido dirigiendo los Comités de Defensa. (Muestra XXXIV)
Como puede observarse de (29) a (31), además de la imperfectividad intrínseca de esta clase de palabra, el valor imperfectivo queda enfatizado por la presencia de frases adverbiales temporales y frases nominales que implican duración (horas, la noche entera, todos estos años).
A lo anterior, puede sumarse, en ocasiones, el valor iterativo de la construcción, según se aprecia de (32) a (34):
Yo mis perspectivas son seguir estudiando hasta coger el doce grado y si puedo seguir sigo, pero en mi cen en mi centro laboral, en mi casa hasta que hasta que sea viejo es trabajando y trabajando (PRESEEA–H11_005)
B: [y cuando] no/ va y come él en// entonces hoy <anónimo>Héctor</anónimo> no llegaba y era timbrándole constantemente// hasta que se apareció/ la piñata se la regaló él (Ameresco– HAV_066_04_17)
entonces / yo / que / considero <énfasis> fundamental </énfasis> es sentirse bien en el hogar / siempre buscando eh / en la casa no se puede desmayar <risas = “I”/> / no se puede detener uno ahí / es constante constantemente cambiando de lugar <ruido = “golpecito”/> / organizando / todo los días hay que organizar algo (PRESEEA– M33_103)
La duración que hemos notado en estas estructuras es coherente con las propiedades que, desde un punto de vista del aspecto léxico, caracterizan a los verbos documentados en esta construcción atributiva:
Por eso te digo, son dos, dos, dos momentos que recuerdo que, que mi vida ha peligrado ¿no? Pero, ninguno de ellos ha sido ni en carretera ni viajando en carretera. (PRESEEA– H21_014)
Si ellos que son los que tienen el dinero el poder de de destruir porque lo que están haciendo es destruyendo el mundo con guerras biológicas, con… porque este es terrorista vamos a irle arriba, entonces, vaya pienso que tienen el dinero para eso, pueden tener el dinero, para arreglar el mundo o tratar de arreglar algo (PRESEEA– H21_014)
como único tienes contacto con el ser humano, donde tú puedes, es es caminando por las calles, ya te digo en una cola, en un, en un, en un museo, en un teatro (PRESEEA–M33_103)
Verbos como viajar, destruir y caminar expresan acciones dinámicas, no momentáneas, que poseen duración interna (de Miguel, 1999).
Tanto la imperfectividad del gerundio, propia de esta categoría gramatical, como la presencia de frases que implican duración y reiteración, junto con el significado intrínsecamente durativo de los verbos que aparecen en la construcción, fortalecen la constitución de una estructura que enfatiza la duración del atributo.
6 Foco
En las secciones anteriores hemos defendido que las estructuras que nos ocupan 1) pueden considerarse construcciones atributivas; 2) se caracterizan por un alto grado de genericidad, que se manifiesta en los sujetos involucrados en la construcción; y 3) enfatizan la duración de la acción a través del carácter imperfectivo del gerundio, aunado al contexto discursivo.
En este apartado, coherentemente con todo lo que acabamos de presentar, propondremos que el gerundio, al cual hemos calificado como atributo, manifiesta un comportamiento similar al de los elementos focales. Los siguientes ejemplos nos permitirán discutir esta idea.
Para mí las navidades, ya a partir del día veinticuatro, ya todo eso es navidad, ya eso es más o menos festejando. (PRESEEA– H21_013)
Si ellos que son los que tienen el dinero el poder de de destruir porque lo que están haciendo es destruyendo el mundo con guerras biológicas, con… porque este es terrorista vamos a irle arriba, entonces, vaya pienso que tienen el dinero para eso, pueden tener el dinero, para arreglar el mundo o tratar de arreglar algo. (PRESEEA– H21_014)
Son varios los aspectos que nos permiten proponer que el gerundio tiene un comportamiento focal.
En primer lugar, en estas estructuras, encontramos un verbo ser que, a nuestro juicio, está funcionando como verbo copulativo, es decir, se trata de un verbo semánticamente vacío, que permite que toda la fuerza de la predicación recaiga en la construcción de gerundio.
En segundo término, la genericidad previa que, como ya vimos, caracteriza a la estructura y diluye el significado tanto del sujeto del verbo copulativo como del sujeto del gerundio, refuerza la relevancia de la acción expresada por la forma no personal.
A lo anterior se suma el hecho de que el orden de los elementos oracionales es, en todos los casos, fijo, en el sentido de que el gerundio no puede anteponerse al verbo copulativo.
Para reforzar la idea del comportamiento focal del gerundio, hay que considerar que, tal como se concibe en la definición de foco (Dufter, 2023; RAE 2009: §40.4 y Zubizarreta, 1999: §64.3), en nuestras construcciones toda la información anterior al atributo es conocida por el hablante y el oyente, mientras que la información nueva es aportada por la oración cuyo núcleo es la forma no personal. De esta manera, se establece un patrón similar al propuesto por Toribio (1992) a propósito de las oraciones de ser focalizador (Ellas iban al río era a buscar agua)5.
Por último, no hay que olvidar que hemos equiparado las estructuras analizadas con otras construcciones existentes en la lengua española, en las cuales el gerundio está siendo utilizado en lugar de un infinitivo (la única forma de abrirlo es sustituyendo el taladro). Retomando la distinción que hace la RAE (2009: §27.1i), con el gerundio se expresa el modo de realizar la acción, mientras que con el infinitivo se identifica la acción misma. En las construcciones que nos interesan, sin embargo, el gerundio no se refiere al modo, por la propia naturaleza de la función atributiva. Y, por otra parte, una comparación entre el uso del infinitivo y el gerundio en nuestras estructuras refleja que, a diferencia del infinitivo, el gerundio focaliza la duración de la acción: Lo que están haciendo es destruir el mundo frente a Lo que están haciendo es destruyendo el mundo.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, proponemos que el gerundio de las estructuras analizadas se comporta como un focalizador aspectual.
7 Conclusiones
En este trabajo hemos hecho una presentación de las estructuras de gerundio no perifrástico documentadas en un corpus oral del español de La Habana. El análisis ha permitido identificar las funciones que prevalecen, dentro de las cuales la más común es la modal, en concordancia con el uso extendido en todo el dominio hispanohablante. Como rasgos que singularizan la variedad cubana del español, detectamos la no aparición del llamado gerundio de posterioridad. Identificamos, además, una estructura de gerundio atributivo, que no ha sido descrita en las gramáticas.
En un primer acercamiento a la construcción, intentamos responder las interrogantes que plantea este uso del gerundio. En específico, abordamos su función como atributo, la genericidad de los sujetos involucrados, el valor aspectual de la estructura, así como la naturaleza focal que identificamos en las construcciones analizadas. Cada una de estas inquietudes involucra una serie de fenómenos gramaticales complejos que ameritan ser analizados con detalle en futuros trabajos. Se trata de una estructura escasamente documentada y que, al parecer, se utiliza sobre todo en la lengua oral, pero que resulta de gran interés para los estudios sintácticos por la variedad de construcciones posibles y porque, al involucrar a varios ámbitos de la gramática del español, evidencia la interdependencia entre las áreas que la conforman.
8 Referencias bibliográficas
Albalá Hernández, M. J. (1988). Contribución al estudio del gerundio en la lengua española hablada en Madrid. Madrid, Universidad Complutense de Madrid.
Almeida Victorero, A. (2020). Apuntes sobre las construcciones adjuntas de gerundio con valor ilocutivo en español. Semas, 1(2), 7–24. https://semas.uaq.mx/index.php/ojs/article/view/21
Almeida Victorero, A. (2019). Análisis descriptivo y sincrónico de la funcionalidad de las construcciones adjuntas de gerundio en el periódico cubano Granma [Master’s thesis, Universidad Autónoma de Querétaro]. Unpublished.
Almeida Victorero, A., & de la Mora, J. (2021). Valor visualizador del gerundio en construcciones adjuntas del español de Cuba. Sintagma, 33, 47–61.
Bello, A. (1847). Gramática de la lengua española destinada al uso de los americanos. Imprenta del Progreso.
Bobes Naves, M. del C. (1975). Sistema, norma y uso del gerundio castellano. Revista Española de Lingüística, 5(1), 1–34. http://revista.sel.edu.es/index.php/revista/article/view/372
Clancy, J., & Merino, L. M. (2023). La impersonalidad. In G. Rojo, V. Vázquez Rozas, & R. Torres Cacoullos (Eds.), Sintaxis del español, The Routledge Handbook of Spanish Syntax (pp. 302–314). Routledge.
Dufter, A. (2023). Estructura informativa. In G. Rojo, V. Vázquez Rozas, & R. Torres Cacoullos (Eds.), Sintaxis del español, The Routledge Handbook of Spanish Syntax (pp. 246-259). Routledge.
Fernández Lagunilla, M. (1999). Las construcciones de gerundio. In I. Bosque & V. Demonte (Eds.), Gramática descriptiva de la lengua española (Vol. 2, pp. 3443–350). Madrid, Espasa Calpe.
Fernández, O., & Táboas, S. (1999). Construcciones impersonales no reflejas. In I. Bosque & V. Demonte (Eds.), Gramática descriptiva de la lengua española (Vol. 2, pp. 1723–1778). Madrid, Espasa Calpe.
Gili Gaya, S. ([1943]1967). Curso superior de sintaxis española. Barcelona, Bibliograf.
González Mafud, A. M. (2022). Corpus de conversaciones Ameresco-La Habana. In Albelda & Estellés (Eds.), Corpus Ameresco. Universitat de València. https://esvaratenuacion.es/
González Mafud, A. M., Pérez Rodríguez, M., Perdomo Carmona, M., & Gutiérrez Fuentes, G. (2010). Muestras del habla culta de La Habana. La Habana, Editorial UH.
Herrero, G. (1994-1995). El gerundio independiente. ELUA, 10, 165–178.
Luna Traill, E. (1980). Sintaxis de los verboides en el habla culta de la Ciudad de México. México, UNAM.
Magallanes, D. M. (1970). Oraciones independientes de gerundio en español. Anuario de Letras, 8, 235–239.
Miguel, E. de (1999). El aspecto léxico. In I. Bosque & V. Demonte (Eds.), Gramática descriptiva de la lengua española (pp. 2977–3060). Madrid, Espasa Calpe.
Mora-Bustos, A., Ortiz Villegas, A. I., & García Zúñiga, H. A. (2022). El gerundio predicativo en español. Folios, 56, 125–142.
Moreno, A. (2014). El gerundio no perifrástico. Estudio de corpus orales del español de Mérida, Venezuela [Doctoral dissertation, Norges Arktiske Universitet]. Unpublished. https://hdl.handle.net/10037/7103
Moreno Cabrera, J. C. (1999). Las funciones informativas: Las perífrasis de relativo y otras construcciones perifrásticas. In I. Bosque & V. Demonte (Eds.), Gramática descriptiva de la lengua española (Vol. 3, pp. 4245–4302). Madrid, Espasa Calpe.
PRESEEA. (2014-). Corpus del proyecto para el estudio sociolingüístico del español de España y de América. Alcalá de Henares, Universidad de Alcalá. http://preseea.uah.es.
RAE. (1973). Esbozo de una nueva gramática de la lengua española. Madrid, Espasa-Calpe.
RAE. (2009). Nueva gramática de la lengua española. Morfología y Sintaxis I. Madrid, Espasa Libros.
Salvá, V. (1835). Gramática de la lengua castellana, según ahora se habla. París, Librería de los SS. Don Vicente Salvá e Hijo.
Sedano, M. (2011). Manual de gramática del español, con especial referencia al español de Venezuela. Caracas, Universidad Central de Venezuela.
Sedano, M. (2023). Sintaxis del español hablado. In G. Rojo, V. Vázquez Rozas, & R. Torres Cacoullos (Eds.), Sintaxis del español/ The Routledge Handbook of Spanish Syntax (pp. 539–550). Routledge.
Stirling, L. (2001). The Multifunctionality of Anaphoric Expressions: A typological perspective. Australian Journal of Linguistics, 21(1), 7–23.
Toribio, A. J. (1992). Proper government in Spanish subject relativization. Probus, 4, 291–304.
Verhaert, A. (2008). El gerundio no perifrástico del español: cómo no ser demasiado explícito ni demasiado implícito. Foro Hispánico: Revista Hispánica de Flandes y Holanda.
Footnotes
Estudios como el de Verhaert (2008, 2009), Almeida (2019, 2020) y Almeida y de la Mora (2021) han analizado la funcionalidad semántica de las construcciones de gerundio no perifrástico desde un enfoque cognitivo-funcional.↩︎
En nuestra investigación no utilizamos el término predicativo tal como lo consideran Mora-Bustos et alii (2022) haciendo alusión a las construcciones en las que el gerundio es el núcleo de una predicación clausal. En la tradición gramatical este tipo de construcción es llamada gerundio independiente (Albalá Hernández, 1988; Bobes Naves, 1975; Fernández Lagunilla, 1999; Herrero, 1994-1995; Luna Traill, 1980; Magallanes, 1970; Sedano, 2011).↩︎
Para más detalles sobre el gerundio independiente, puede consultarse Albalá Hernández (1988), Fernández Lagunilla (1999), Herrero (1994-1995), Moreno (2014) y Sedano (2011).↩︎
Reconocemos que se trata de una clasificación que ha suscitado innumerables debates, pues tal como se señala en la NGLE los límites entre ambas estructuras «son a veces borrosos» (RAE, 2009: §27.1p).↩︎
Para más detalles acerca de las semejanzas y diferencias entre las oraciones seudohendidas y aquellas con ser focalizador, puede consultarse Sedano (2023). Y para una mejor comprensión de las funciones informativas de algunas de estas estructuras, véase Moreno Cabrera (1999).↩︎